Rem Koolhaas ha convertido una destilería centenaria de Milán en un nuevo centro de arte para la Fondazione Prada, y dentro de este complejo se encuentra la cafetería que la firma de moda ha encargado al director de cine Wes Anderson. El Bar Luce recrea la atmósfera de un café típico del viejo Milán. El edificio que lo alberga mantiene un conjunto de estructuras de acero aplicado a los muros de carga que proporcionan un refuerzo estructural que permite preservar la superficie, con detalles expuestos como el techo abovedado que se reproduce en "miniatura" el techo de las Gallerias Vittorio Emanuele, uno de los lugares simbólicos de Milán.
Otro elemento clave del espacio es la galería ubicada en la parte
superior de la barra, en una especie de esquema decorativo. En cuanto a equipamiento, las
sillas, los muebles de formica, el pavimento, los paneles de chapa de madera
que cubren las paredes y la paleta de colores recuerdan a la cultura popular y
la estética de Italia en los años cincuenta y sesenta, del neorrealismo italiano a la que Anderson es muy
aficionado.
Bar Luce. Fondazione Prada, Milano, Largo Isarco 2
20139 Milan. T +39 02 56 66 26 11.
Fotografías: Attilio Maranzano, cortesía de Fondazione Prada.
Qué interesante me parece que contraten a un director de cine para decorar un espacio, aunque tratándose de Wes Anderson como dices no es de extrañar... Estar en este bar sería como estar en una de sus películas, me encanta!
ResponderEliminarRomán: estoy de acuerdo. Anderson es un director preocupado especialmente por la estética de sus películas y por eso resulta tan personal...Gran Hotel Budapest es una película alucinante y no recuerdo muy bien de qué iba.
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