La diseñadora asturiana afincada en Milán, Patricia Urquiola
Entrevisté a la Urquiola en una ocasión, prácticamente al vuelo porque, aunque es una persona realmente accesible, su agenda está más apretada que los muslos de un culturista. Aquel día, entre sus apalabras apresuradas y su convicción propia de señorita bien de Oviedo, intenté desentrañar el secreto de su sabiduría, el misterio de su éxito rotundo, la clave de su inspiración inagotable. La verdad, confieso que no lo conseguí, y pude sacarle poco más que sus clásicas referencias a la artesanía de ganchillo de su abuela y a la inspiración en el trabajo manual de culturas exóticas.Colección Tropicalia de Moroso, diseñada por Patricia Urquiola
¿Cómo lo hace esta mujer para conseguir salir airosa de todos los retos profesionales? ¿Cómo ha logrado situarse a la vanguardia del diseño internacional sin perder la sonrisa? ¿Qué hay detrás de sus diseños, además de horas, experiencia, mucho oficio y un gran equipo de colaboradores? No lo sé.
En aquella entrevista me habló de pensar en una atmósfera determinada para lograr ese punto de cocción perfecto para una pieza. Nada nuevo que no nos cuenten todos los diseñadores.
Colección de baño para la firma Axor Hansgrohe de Urquiola
Colección Vieques para Kettal, de Patricia Urquiola
El buen gusto, como la elegancia y la creatividad son cualidades innatas imprescindibles para destacar como Patricia Urquiola.
ResponderEliminarTambién son necesarias una buena base, muchas horas de trabajo, e incluso, el saber encontrar la suerte para el éxito...
Se nace con don o no se nace, e aquí la diferencia de ser un genio o no serlo.
Pero para el resto de los mortales como yo, se puede aprender el don del buen gusto?
Podemos reeducarnos?
Quiero ser optimista y pensar que sí, a base de ver mucho y tener un buen maestro...
Pero que me decís del don de la creatividad, se puede adquirir?